jueves, 13 de febrero de 2014

Un poema de amor a lo moderno



No me gusta la sensación de echarte de menos cuando te tengo cerca
Siento un vértigo inmenso ante ese agujero que se abre entre los dos
Parece tener un monstruo en sus entrañas
 espera a que caigamos, por fin, agotados, alguno, uno de los dos.
No me gusta la sensación de tenerte y no tenerte,
De estar encima, a un lado u a otro, y no estar
Parece que la noche es el lugar para perdernos,
entonces es justo cuando nos encontramos
el abismo disminuye, nos enlazamos.
Tú cabeza sobre mi pecho,
mis brazos abarcan tu cuerpo.
Ya no existe la distancia, el agujero negro.
Mañana, otra vez mañana se abrirá el hueco,
buscaremos un lugar remoto, nocturno, donde escondernos.
El día, el sol jugará a separarnos,
 a quitarnos el tiempo que podríamos regalarnos,
el día se llevará los abrazos, el momento.
A la noche, bajo la sombra de la luna,
escondidos tras el velo del universo,
le robaremos al día unas horas para querernos.
A las cuatro, siempre a las cuatro,
después de derramar palabras,
robamos un rincón al día en el que poder querernos.